El problema del desempleo es una de las preocupaciones de los españoles. Las estadísticas son muy elocuentes, y la situación de pandemia no ha hecho más que agravar estas cifras. Pero la situación es aún peor si, a la desgracia de perder el trabajo, se le une la de tener que seguir haciendo frente a la letra de un préstamo. ¿Qué hacer si estoy pagando un préstamo y me quedo en paro? Hay diversas soluciones orientadas a que tu situación se normalice.
Tengo un préstamo y me quedo en paro, ¿qué hago?
En primer lugar, no tratar de que nos domine el agobio. Salir del desempleo puede ser complicado, pero en nada ayudará que tengamos una sensación de culpabilidad o pesadumbre. Quizás necesites estar un día pensando en tu nueva situación, pero has de ponerte en marcha de inmediato.
Antes de nada, hay que seguir atendiendo los pagos de las diversos suministros y bienes, el préstamo también. Si tienes derecho a desempleo, ya cuentas con unos ingresos durante un máximo de 2 años. Pero si ves que esta situación nueva no te da para atender los pagos, has de comunicarlo inmediatamente a tu entidad prestamista, ya sea un banco o una financiera. Nunca trates de desentenderte, ya que adquiriste una obligación, y no pagar nunca es una buena idea, te acarreará más problemas.
Como muestra de buena voluntad, anticípate al impago y comunica a esa entidad tu nueva situación. Establece de manera conjunta un nuevo plan de pagos adaptado al desempleo A fin de cuentas, ellos han de cobrar y tú estás demostrando tu voluntad de seguir cumpliendo con tu deber. Por regla general, las entidades atienden de buen grado estas solicitudes. Cuando tu situación financiera sea mejor, podrás aumentar la cuota a cómo la tenías en un principio. Recuerda que no pagar implica aparecer en un fichero de morosos.
Dar la vuelta a la situación depende de ti
Salir del desempleo es de por sí un trabajo, así que lo mejor es ponerse manos a la obras. ¿Necesitas unos consejos que pueden ayudarte a encontrar empleo? ¡Vamos a ello!
- Actualiza tu curriculum, agrega nuevas formaciones que hayas realizado y elimina las irrelevantes.
- Buscar empleo puede comenzar con llamar a tus contactos y darse de alta en LinkedIn. Hay muchas oportunidades esperando.
- Piensa en la posibilidad de emprender. Puedes tener habilidades interesantes para ello y no necesitas mucho dinero.
- Sigue con tu rutina diaria, levántate temprano como si fueras a trabajar. De hecho tu trabajo ahora es encontrar uno.
- No desesperes, puede ser un proceso largo, pero la constancia da frutos.
Por tanto, si tienes un préstamo y te quedas en paro, pon todo de tu parte para seguir cumpliendo con tu deber. La comunicación con la entidad es siempre tu mejor arma. Con constancia terminarás encontrando un empleo a tu medida y tu deuda quedará liquidada en cuento menos lo esperes. ¡Mucho ánimo!